Los nuevos cambios tecnológicos, los nuevos tipos de consumidores, la orientación al cliente, la innovación, la eficacia de los procesos productivos y el continuo mejoramiento de los medios de comunicación, inspiraron la creación de los modelos de negocios actuales con el fin de adaptarse a los nuevos escenarios que se presentan en el mercado.
El abandono de los modelos de negocios tradicionales es una realidad y el nuevo pensamiento empresarial ya no se está preguntado ¿cómo, cuándo y dónde?, sino ¿por qué?, e incluso ¿por qué no? El panorama actual que se presenta pretende orientarse hacia un mayor enfoque en la atención al cliente, reconociendo las oportunidades que están en el entorno cada vez más veloz y competitivo, haciendo que el triunfo de una empresa esté ligado actualmente a acciones poco convencionales.
Una de las premisas actuales es que el éxito de las empresas comienza cuando entienden que el trabajo es verdaderamente importante, y no así el empleo o la realización de este de forma interna. Por ello, se observa cada vez más la disminución de áreas y puestos presentándose una tendencia hacia ingresos variables, honorarios o outsourcing.
Por otro lado, ¿cuántas veces se olvida el verdadero objetivo del negocio para dedicarse a resolver cuestiones operativas, imprevistas, y no así lo estratégico e importante en una empresa?
Pareciera que Pareto ejemplifica a la perfección la situación en la que se encuentran muchas empresas hoy. Su famoso principio 80-20 describe como las empresas destinan el 80% de su tiempo para realizar actividades más apremiantes, mientras que el otro 20% se usa para actividades que generan valor.
Los nuevos modelos de negocios están enfocados en que las empresas eviten este tipo de problemáticas; al mismo tiempo de que los empleados deberán ser conscientes de tomar las decisiones correctas para llegar a los objetivos y mejorar el rendimiento. El tema es que las empresas hagan lo verdaderamente importante, dejando de lado todo aquello que reste enfoque a la esencia del negocio.
El acaparamiento del mercado dejará de ser para los grandes y fuertes, ya que poco a poco habrá mayores oportunidades de aparecer y sobrevivir para aquellas empresas que sean más flexibles y rápidas para reaccionar.
